A la hora de solicitar una incapacidad permanente a la Seguridad Social, y conseguir una pensión por ello, es normal que nos surjan gran cantidad de dudas e imprevistos a lo largo del proceso.

Aunque puede resultar realmente agotador, es un proceso bastante largo que necesita la consecución de diferentes pasos. El conjunto de todos los procesos, sea cual sea el grado de discapacidad, recibe el nombre de expediente de incapacidad permanente.

La solicitud

Siempre se empieza por un procedimiento administrativo, momento en el que se solicita la incapacidad y se pasa por una evaluación médica realizada por un profesional cualificado. Esta debe pasar por un tribunal médico que lleve a cabo la resolución.

Si la decisión no es favorable al solicitante, se debe pasar al segundo paso del proceso.

La fase judicial

En este momento es imprescindible que acudamos a un abogado especializado. Al igual que acudimos a abogados despidos por temas laborales, en este caso también debemos solicitar el servicio de un abogado incapacidad, ya que, si queremos seguir, tenemos que ir a los tribunales.

Así, nos aseguramos que un profesional gestione la defensa y nos asegurará mayores posibilidades de conseguir el éxito. Uno especializado sabrá bien qué alegar y cómo enfrentarse a los abogados de la Seguridad Social.

Concesión de pensión por incapacidad

Aunque en el primer paso no es necesario un abogado, ya que cualquier persona puede realizar la solicitud, sí es muy recomendable contra con uno especializada si queremos conseguir una pensión.

Lo mejor es que, si te encuentras en este momento, hagas una búsqueda de abogados Coruña o sea cual sea tu zona, y preguntes por especializados en Derecho Laboral y de la Seguridad Social.

El aspecto más importante que será decisivo para ganar o no serán los informes médicos que lo avalen. Aparte del contenido como tal, deberán estar enfocados y planteados de manera que justifique dicha pensión. El abogado debería hacer todo lo posible por conseguir esto, y seguramente esté muy actualizado y sepa bien cómo manejarlo todo.

El abogado aconsejará bien sobre qué documentos presentar y cuáles no, ya que la gente suele presentar cuantos más tenga, pero muchos de ellos pueden llegar a ser contraproducentes y perjudicarnos.